La Iglesia pentecostés Inc Panamá

Los pentecostales surgieron de los evangélicos; por tanto, nuestra teología es similar a la de ellos. Sin embargo, existen algunas divergencias significativas, especialmente en lo que se refiere a los dones del Espíritu y la sanación. A lo largo de los años, la Iglesia de Pentecostés, procedente de la Iglesia Apostólica, ha mantenido las creencias de las iglesias pentecostales, que comenzaron a principios del siglo XX, a menudo denominadas pentecostales clásicas. Sin embargo, también existen algunas pequeñas diferencias entre estas iglesias pentecostales. A medida que se establecen nuevas iglesias, casi a diario, y siguen surgiendo nuevas doctrinas, no es raro que las iglesias antiguas pierdan o adulteren sus doctrinas fundamentales.​ La Iglesia de Pentecostés considera que nuestros principios o creencias son uno de los aspectos más críticos de nuestro culto porque forman los fundamentos de la doctrina cristiana. Por esta razón, los padres fundadores y otros líderes de la iglesia han seleccionado en oración y cuidadosamente 11 creencias doctrinales de La Iglesia de Pentecostés con las Escrituras que las acompañan para facilitar su estudio y comprensión. Estas doctrinas son:

LA BIBLIA

Creemos en la inspiración divina y la autoridad de las Sagradas Escrituras. Que la Biblia es infalible en su declaración, final en su autoridad, comprensiva y todo-suficiente en sus provisiones. (2 Timoteo 3:16, 17; 2 Pedro 1:20-21).

EL ÚNICO DIOS VERDADERO
Creemos en la existencia del Único Dios Verdadero, Elohim, hacedor de todo el universo; indefinible pero revelado como Dios Trino - el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo (Génesis 1:1; Génesis 1:26; Mateo 3:16, 17; 28: 19; 2 Corintios 13:14); uno en naturaleza, esencia y atributos - Omnipotente (Deuteronomio 6:4; Job 42:2; Isaías 46:9, 10; Apocalipsis 19:6); Omnipresente (Salmo 139:7-12; 147:5); Omnisciente (Job 42:2; Isaías 46:9, 10; Hechos 5:4-5).

LA NATURALEZA DEPRAVADA DE LA HUMANIDAD
Creemos que «todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios» (Génesis 3:1-19; Isaías 53:6; Romanos 3:23), y están sujetos al castigo eterno (Mateo 13:41, 42; Romanos 6:23), y necesitan Arrepentimiento (Hechos 2:38; Mateo 4:17; Hechos 20:21) y Regeneración (Juan 3:3, 5; Tito 3:5).

EL SALVADOR
Creemos que la necesidad que tiene la humanidad de un Salvador ha sido satisfecha en la persona de Jesucristo (Mateo 1:21; Juan 4:42; Hechos 2:36; Efesios 5:23; Filipenses 2:6-11), debido a Su Deidad (Isaías 9:6, Juan 1:1; Juan 20:28; Romanos 9:5; Tito 2:13-14), Nacimiento Virginal (Isaías 7:14; Mateo 1:18; Lucas 1:25-26), Muerte Expiatoria (Romanos 3:25; Hebreos 9: 22; 1 Juan 2:2), Resurrección (Mateo 28:5-7; Hechos 2:24; Hechos 2:36; Hechos 10:39-40; 1 Corintios 15:3-4) y Ascensión (Hechos 1:9-11; Hechos 2:33-36), Su Intercesión Permanente (Romanos 8: 34; Hebreos 7:25) y Su segunda venida para juzgar a vivos y muertos (Hechos 1:11; Hechos 10:42; 1 Tesalonicenses 4:16-18, 2 Timoteo 4:1; Apocalipsis 22:12, 20).

ARREPENTIMIENTO, JUSTIFICACIÓN Y SANTIFICACIÓN
Creemos que todos los seres humanos tienen que arrepentirse y confesar sus pecados ante Dios (Lucas 15:7; Hechos 2:38; Hechos 3:19; Hechos 17:30), y creer en la muerte vicaria de Jesucristo antes de poder ser justificados ante Dios (Romanos 4:25; 5:1). Creemos en la santificación del creyente mediante la obra del Espíritu Santo (1 Corintios 1:30; 6:11) y en el don de Dios de la vida eterna al creyente (Juan 17:2, 3; Juan 10:27, 28; Romanos 6:23b; 1Juan 5:11-13.

LAS ORDENANZAS DEL BAUTISMO Y LA CENA DEL SEÑOR O COMUNIÓN
Creemos en la ordenanza del bautismo por inmersión como testimonio de un converso que ha alcanzado la edad responsable de 13 años. (Mateo 3:16; Mateo 28:19; Marcos 1:9,10; Marcos 16:16; Hechos 2:38). Los bebés y los niños no se bautizan, sino que se dedican al Señor (Marcos 10:13-16; Lucas 2:22-24, 34). Creemos en la ordenanza de la Cena del Señor o Santa Cena, de la que deben participar todos los miembros que estén en plena comunión (Lucas 22:19, 20; Hechos 20:7; 1 Corintios 11:23-33).

BAUTISMO, DONES Y FRUTOS DEL ESPÍRITU SANTO
Creemos en el Bautismo del Espíritu Santo para todos los creyentes con la evidencia inicial de hablar en lenguas (Joel 2:28, 29; Hechos 2:3,4,38,39; Hechos 10:44-46; Hechos 19:16), y en la operación de los dones y fruto del Espíritu Santo (Romanos 12:6-8; Gálatas 5:22,23 y 1 Corintios 12:8-11; 28-30).

SANACIÓN DIVINA
Creemos que la curación de enfermedades y dolencias está prevista para el pueblo de Dios en la expiación (Isaías 53:4,5; Mateo 8:7-13; 16,17; Marcos 16:17,18; Lucas 13:10-16; Hechos 10:38; Santiago 5:14-16). Sin embargo, la Iglesia no se opone a la medicación por parte de médicos cualificados.​

DIEZMOS Y OFRENDAS
Creemos en el diezmo y en la entrega de ofrendas voluntarias para promover la causa del Reino de Dios. Creemos que Dios bendice al dador alegre (Génesis 14:18-20; Malaquías 3:6-10; Mateo 23:23; Hechos 20:35; Hebreos 7:1-4; 1 Corintios 16:1, 2; 2 Corintios 9:1-9).

LA SEGUNDA VENIDA Y LA OTRA VIDA
Creemos en la segunda venida de Cristo y en la resurrección de los muertos, tanto de los salvos como de los no salvos. Los que son salvos a la resurrección de vida y los no salvos a la resurrección de condenación (Daniel 12:2; Marcos 13:26; Juan 5:28, 29; Hechos 1:11; Hechos 10:42; Romanos 2:7-11; Romanos 6:23).​

MATRIMONIO Y VIDA FAMILIAR
Creemos en la institución del matrimonio como una unión establecida y ordenada por Dios para la relación íntima y de por vida entre un hombre como esposo y una mujer como esposa, tal como se define biológicamente al nacer. Creemos que Dios instituyó el matrimonio principalmente para la ayuda mutua, la comunión y el consuelo que uno debe tener por el otro y para la procreación honorable de los hijos, y su formación en el amor, la obediencia al Señor y la ciudadanía responsable. (Génesis 2:18, Génesis 21-25; Mateo 19:4-6; 1 Corintios 7:1-2).